A través de sencillos ejercicios, con el Método Lenoarmi, la futura mamá puede lograr un equilibrio completo de cuerpo y alma, oxigenar mejor, prevenir problemas óseos, dolores musculares y por sobre todo estimular el posicionamiento del bebé para un parto más relajado y sencillo.
La doctora María Rosa Puigvert creó el método en 1985 demostrando su eficacia en todo tipo de personas, desde bebés hasta ancianos. Y las mujeres embarazadas, a partir del cuarto mes, se han beneficiado de esta técnica con un alumbramiento mucho más tranquilo, ya que estará más relajada y eso se lo transmite a su bebé.
Los ejercicios tienen como objetivo que la mujer tenga un buen estado físico durante el embarazo, que no suba de peso en exceso, tonificar la piel, prevenir la aparición de flacidez y celulitis, evitar los momentos de angustia y ansiedad, muy comunes con las hormonas, problemas de circulación, de colon, intestinales y urinarios, dolores de piernas y pies cansados, tener un buen descanso de la madre para que pueda entrar en un estado de relajación mientras duerme.
Esta técnica utiliza ejercicios que se realizan en el agua, para estimular la relación de la madre y el bebé, partiendo del hecho en que se coloca a la mamá en el mismo grado de ingravidez que tiene el bebé en el vientre materno.
Además, se utilizan técnicas de terapia de pareja en la cual el padre ayuda a la madre en algunos ejercicios y métodos de relajación y estimulación tanto para la pareja como para el bebé. Se armoniza la relación con el peque, entre la pareja, su entorno familiar y social.
Esta terapia logra rescatar los movimientos naturales y la futura mamá aprende a moverse sin tensiones, de manera relajada y con una correcta respiración, mejorando la oxigenación y dando una sensación de bienestar, autorregulación y autocontrol.
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