Para los papás que les gustan los deportes, sobre todo el futbol, que su hijo practique y participe en torneos de este tipo es su mayor felicidad. Pero sin duda, ya sea en un partido amistoso, en un entrenamiento o en una final, siempre podemos encontrar diferentes tipos de papás que se toman muy en serio el papel al ver a su peque en una cancha. ¿Con cuál te identificas?
Papá exigente
Es exigente y busca que su hijo brilla en todo el partido. Puede ser comprensivo con un 5 en la boleta, ¡pero jamás podrá perdonar que falle un gol!
Papá Coach
Es, incapaz de mantenerse sentado en las gradas debido al nerviosismo, se dedica a recorrer de lado a lado de la cancha dando indicaciones, aún sin importarle lo que diga el coach e incluso el árbitro, él se siente un experto analista en ese tema.
Papá relajado
Aunque trata de mantenerse tranquilo, en la cancha se puede ver rígido, preocupado, pero es el que no quiere que su hijo note su falta de aire y taquicardia por nervios.
El peleonero
Es el papá que termina peleándose con los papás del equipo contrario, con el árbitro y con el coach.
El orgulloso
No importa si su hijo es bueno o no tanto, es el más orgulloso y trata de gritarlo a los cuarto vientos cada que su hijo toque el balón.
El pulcro
Parece que va a una sesión de modelaje y no a acompañar a su pequeño a un partido. Va perfectamente bien coordinado y peinado.
Papá Fan
No pierde ocasión para inmortalizar cada movimiento de su hijo, tomando a la vez fotos y video para no perder ningún detalle.
Papá Invisible
Suele pasar, son papás que no tienen mucho tiempo para poder ir a los entrenamientos o partidos y rara vez se deja ver en un partido a pesar de sus promesas.
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