Los recién nacidos tienen una capa protectora llamada vérnix caseosa que tiene un alto contenido de agua y grasa, los cuales protegen su piel. Este manto sebáceo se localiza principalmente en tres zonas del cuerpo: en los pliegues cutáneos, en el dorso y en la parte posterior de las orejas.
Debido al cambio de ambiente, alteraciones en la temperatura y el baño diario se va dando una pérdida de esta capa, por lo que la piel queda desprotegida. Actualmente existen diferentes productos para hidratar la piel de los bebés que están diseñados para tratar su piel delicada y mantener una correcta hidratación de esta piel.
Por esto, la piel de los bebés es muy delicada y frágil y tiene una menor capacidad de protección que la de un adulto, al ser más frágil necesita una atención especial con cuidados de hidratación específicos a su desarrollo.
Lee el articulo completo en: Padres e Hijos México
via http://www.padresehijos.com.mx
No hay comentarios:
Publicar un comentario