A todos los bebés les encanta sentirse amados y un suave masaje es la mejor manera para que pases tiempo con él y además le ayudes en su desarrollo motriz, del lenguaje y fortalecer su sistema inmunológico.
Con sólo 20 o 30 minutos, lograrás grandes cosas con tu peque. ¡Comencemos!
Frota el aceite o crema en tus manos, acercalo a su nariz para que pueda disfrutar el aroma por unos segundos. La mejor manera es comenzar con una secuencia ordenada que inicie por los pies y termine en la cabeza, ya que su rostro es muy sensible y delicado. Es mejor iniciar poco a poco con los pies para que no se sienta “invadido” o incómodo.
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Pies
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Presiona levemente con tu dedo índice su planta del pie, a la altura del talón.
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Con los dos pulgares extendidos, presiona su planta desde el talón hacia los dedos.
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Realiza una delicada torsión y presión al mismo tiempo en cada uno de sus deditos.
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Piernas
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Sostén el tobillo del bebé con una mano y con otra rodea su pierna en forma de pulsera. Comienza el masaje en la cadera y hacia los pies, alternando las manos. Recuerda que debe estar acostado en una superficie plana.
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Si tu peque necesita más fuerza en sus piernas para comenzar a caminar, pon las manos en forma de brazalete y deslízalas hacia el pie realizando una ligera torsión como si estuvieras exprimiendo una prenda delicada.
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Abdomen
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Apoya tus manos sobre su vientre y coloca tus pulgares planos sobre el ombligo del bebé y deslízalos hacia los lados con un poco de presión, pero sin hundir el vientre.
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Con la yema de los dedos recorre su abdomen en círculo, en sentido de las manecillas del reloj.
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Brazos
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Desliza tu mano desde el hombro hasta su mano con una presión ligera y repite el mismo movimiento de las piernas: sostén su muñeca y con la otra mano haz estiramiento de la muñeca hacia el hombro y viceversa.
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Realiza una suave torsión en sus brazos como si exprimieras algo nuevamente, creando un brazalete alrededor de ambos brazos.
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Manos
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Toma sus dedos y alárgalos con cuidado, al final da una delicada torsión.
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Realiza círculos alrededor de la muñeca suavemente.
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Con tu pulgar masajea su palma en círculos delicados hasta llegar al centro.
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6. Cara
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Coloca tus dedos en el centro de la frente y con tus pulgares deslízalos hacia los lados suavemente. Presiona las cejas de adentro hacia fuera; de igual forma hazlo con los pómulos.
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Dibuja sonrisas con tus dedos pulgares sobre su labio inferior y superior.
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Haz pequeños círculos alrededor de su mandíbula con las yemas de tus dedos.
Puede ser que las primeras veces, tu bebé se ponga inquieto o llore durante o después del masaje. Es normal y benéfico ya que el llanto es liberador, sólo hazle sentir que lo amas con caricias y abrazos.
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