Los perros son criaturas sensibles y empáticas, capaces de conectar con el ser humano de una forma única y positiva. No es de extrañar que actualmente se entrene perros para personas con diversas enfermedades, siendo un gran apoyo para el día a día.
Los perros de asistencia son aquellos entrenados para ayudar y asistir a una persona con discapacidad. Muchos de ellos son entrenados por asociaciones, mientras otros lo son por los propios usuarios con o sin ayuda de un entrenador canino profesional. Entre los padecimientos que se pueden tratar por medio de animales y que han sido todo un éxito en el mundo son: autismo, discapacidad intelectual, esquizofrenia, parálisis cerebral, síndrome down, problemas de abuso y explotación sexual infantil.
Existen algunos casos sobresalientes como:
Azul, el segundo perro de Alerta Médica en México. Fue entregado a Angélica quien tiene Diabetes Mellitus tipo I. Azul fue entrenado para detectar las bajadas de azúcar de Angélica; y al detectarlas le ladra para alertarla y que ella pueda reaccionar con anticipación.
Siri es una perra de asistencia que tiene habilidades como portar y cobrar objetos, abrir puertas y cajones, ayudar a su usuario a vestirse o desvestirse, prender luces, entre muchas otras cosas. Siri apoya a su usuario que tiene una paraplejia secundaria.
Aba es un perro de servicio para Emmanuel, niño con autismo moderado. Los objetivos principales del trabajo que realiza Aba son evitar las conductas de fuga, apoyar en seguridad vial, así como mejorar la calidad de vida tanto de él como de su familia.
Todos ellos fueron entrenados en Bocalán México donde se adiestra y capacita para asistir a personas que padecen de diabetes, autismo o paraplejia. Posteriormente de haber sido entregados se realiza un seguimiento cada 3 a 6 meses dependiendo de la discapacidad que asista.
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