También llamada “higiene natural infantil” o “eliminación por comunicación”, la crianza sin pañal ya la utilizan de forma generalizada muchas mujeres en India, África y Japón desde hace años. Estea tendencia es cada vez más extendida por varias razones, algunos papás lo hacen por ser una opción más ecológica, ya que evita desechar los pañales usados a la basura, otros aseguran que es una crianza más natural y hay varios papás que comentan que es una opción mucho más económica, no sufren problemas de piel como dermatitis o rozaduras, así como menos problemas de estreñimiento.
Prescindir de los pañales es una metodología propuesta por Laurie Boucke e Ingrid Bauer, los cuales comentan lo importante que es que los padres aprendan a interpretar las señales que les dan sus hijos cuando necesita orinar o defecar. Estas señales pueden ser algunas expresiones faciales, la tensión en los músculos abdominales, cambios en la respiración, el llanto del bebé, así como ciertos sonidos guturales son alertas frecuentes.
Para llevarla a cabo, los papás deben colocar al bebé en un lugar adecuado y repartir orinales por toda la casa, en especial en las estancias donde el pequeño pasa la mayor parte de su tiempo.
¿Cómo funciona?
La psicóloga Regine Schön de la Universidad de Helsinki comenta que la tarea consiste en que los padres emitan un sonido repetido cada vez que vean en la cara de los bebés la necesidad. De este modo, el pequeño aprende a identificar el sonido con la deposición o micción. "Los bebés son conscientes de sus evacuaciones desde su nacimiento y, por tanto, desde muy corta edad emiten gestos que las anteceden".
Los expertos comentan que al principio es normal que haya varios escapes, pero con el tiempo, deja de ocurrir. Para evitar esto, se pueden usar pañales de apoyo en los casos en los que es más difícil captar las señales del bebé, como por la noche o cuando salen de viaje.
Muchos son los especialistas,también muestran sus dudas contra la crianza sin pañales por varias cuestiones de desarrollo e higiene.
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