Amy Smith Demi-Mai corrió contenta hacia su columpio favorito. Pero al tirarse por el tobogán, gritó de dolor. Alguien había dejado una botella rota, y la pequeña se clavó el vidrio. Sus padres la vieron correr de un lado a otro horrorizados, manchada de sangre. Evidentemente, tuvieron que llevarla al hospital.
Lee el articulo completo en: GuiaInfantil.com
via http://www.guiainfantil.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario