martes, 24 de enero de 2017

Cómo evitar ser una familia tóxica

No todas las familias son sólo nidos de amor, confianza y afecto. También hay situaciones que generan estrés permanente en uno o varios de sus integrantes, causando malestar y sufrimiento. Algunas la mayoría de las veces se hace sin querer, sin mala intención, en algunos casos existen factores como la violencia, física o verbal que deriva en una familia no saludable. El problema de esto es que se relacionan con inseguridades o problemas sociales y de autoestima graves. Para evitarlo, los especialistas recomiendan:

 

Evitar las etiquetas y roles

Las etiquetas afectan a la identidad de los niños, a cómo se percibe y se valora a sí mismo. Aunque él no se sienta así, oír ese adjetivo repetidamente en las personas de su familia, a las que admira, sientan un precedente sobre cómo debe comportarse o actuar. Poner una etiqueta a un hijo es una forma de contaminar su conducta e inculcarle cómo es o cómo debe ser.


Exceso de amor

Seguramente has oído la frase “nadie te va a querer como te queremos nosotros”, aunque puede tener un poco de razón, hará que alguna mala acción por parte de un familiar, sea aceptada porque si lo hizo su familia fue “por su bien” y aunque sea un familiar, hay hechos como abusos y violencia que no se deben permitir jamás.

 

Sobreprotección

Los extremos nunca son sanos, y mientras que algunos padres se pasan de negligentes y desatienden a sus hijos, otros son sobreprotectores y están demasiado encima de ellos. En estos casos, la mayoría niños se vuelven inseguros. Los niños necesitan explorar su entorno, sólo con supervisión, pero la sobreprotección puede dañar su aprendizaje y la confianza en sí mismos.

 

No meterlos en problemas de adultos

Los niños no son una forma de arreglar problemas de pareja, de sentirnos respetados por los demás, de trasladar nuestras frustraciones y deseos incumplidos hacia otras personas.

Aunque quieras tener el alumno más inteligente de la clase o de algún deporte, hay que evitar a toda costa que carguen con la presión de nuestros deseos.

 






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