¿Has notado que tu pequeño ensucia su ropa de popó a pesar de que ya ha aprendido a usar el baño solo? Si tiene más de 4 años cumplidos y notas que no sabe controlarse correctamente para ir al baño, tal vez tenga encopresis.
La encopresis también se conoce como incontinencia fecal y es muy común en los pequeños; no por eso, debes restarle importancia, pues de no atenderse a tiempo podría acarrear otros problemas.
Este trastorno se presenta en niños que, a pesar de haber aprendido a controlar sus esfínteres, vuelve a tener accidentes y a manchar su ropa en cualquier momento o lugar. Los episodios de encopresis pueden repetirse varias veces al mes y se puede prolongar semanas o meses.
Algo en lo que debes poner especial atención es si tu pequeño lo hace de forma involuntaria o a propósito. En ambas situaciones necesita atención médica.
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Los motivos para que tu hijo tenga encopresis pueden ser variados: se presenta por estreñimiento, por falta de estímulos adecuados para controlar sus esfínteres, presión por ir al baño solo o problemas emocionales como el trastorno de oposición desafiante.
Sin importar cuál sea la causa, los niños con encopresis tienden a experimentar mucha vergüenza por lo que les ocurre, y puede provocarles inseguridad, culpa y baja autoestima.
Para detectar si se trata de encopresis, debes vigilar las veces en que ocurren estos accidentes y observar si tu pequeño se siente angustiado, pues de manera inconsciente podría estar dando señales de que algo está mal.
Si tu pequeño defeca su ropa más de 2 veces al mes, consulta a su pediatra para que te indiqué la mejor manera de tratarlo, tanto médica como psicológicamente.
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