Durante el primer año de tu bebé, la cabeza es ligeramente más grande al resto de todo su cuerpo, por eso suele ser la zona que más recibe impactos con mayor frecuencia. Los golpes en la cabeza para su salud depende de la altura de la que cae y la velocidad con que se pega en la cabeza, entre más alto caiga mayor será el golpe, las lesiones pueden ser más graves.
Es importante que sepas sobre la superficie en donde ocurrió el golpe ya sea pavimento, pasto, una puerta, ventana, etc. Dichas lesiones se pueden clasificar:
Abiertas: Cuando hay sangre porque se daña la piel o el cráneo.
Cerradas: Se reconocen por la aparición del famoso ‘chipote’ o porque la zona donde recibió el golpe se hunde.
En esta etapa de tu bebé y sobre todo hasta su primer año de edad, la cabeza es ligeramente más grande al resto de su cuerpo; por eso es la zona que recibe impactos con mayor frecuencia. El riesgo de los golpes en la cabeza para su salud depende de la altura de la que cae y la velocidad con que se pega en la cabeza: entre más alto caiga o más brusco se pegue, las lesiones pueden ser más graves.
Lo que debes hacer
-Revisa que la zona donde está tu hijo sea libre de objetos que se puedan caer, como cables eléctricos.
-Si está llorando, quiere decir que respira, por lo tanto sus funciones vitales están presentes y su vida no corre peligro.
-Si observas que hay hemorragia, haz presión sobre la herida con gasas o toallas, también puedes usar la misma ropa del pequeño.
-Si solamente tiene un chichón, coloca hielo envuelto en una bolsa de plástico o en alguna tela sobre la zona del golpe.
Lo que no debes hacer
Sobar el área del golpe.
Poner alcohol en la herida.
Cortar el cabello para buscar la lesión.
Si la herida es grave o sangra mucho, no trates de lavarla.
No lo muevas bruscamente para hacerlo reaccionar.
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