Cuando Kim quedó embarazada nuevamente decidieron no saber el sexo del bebé, optando por mantenerlo como sorpresa.

Kim admitió que había esperado ser madre tanto de una niña como de un niño, ya que proviene de una familia de niña y niño, pero nunca pensó que se haría realidad su más grande sueño.

Además, después del nacimiento de su primer hija, Hazel, la pareja sufrió un aborto espontáneo lo que fue un momento muy difícil para la pareja.Pero cuando se enteró que estaba embarazada decidió conocer el sexo del bebé en el momento del parto, aunque ella aseguraba que se trataba de otra niña.


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