Cómo ser un cuenta cuentos para tus hijos

 

No hay excepción: todos crecimos disfrutando cuentos como La Bella durmiente, Caperucita Roja, Pedro y el lobo y demás maravillosos relatos. Éstos nos marcaron de por vida dejándonos una enseñanza, una bonita anécdota y también nos divirtieron mucho.

 

Los cuentos son una de las formas de entretenimiento más antiguas que existen, y así es como hemos llegado a conocer muchas e increíbles historias que despiertan nuestro interés por conocer más y estimulan nuestra imaginación.

 

Escuchar cuentos es una forma de fomentar en nuestros hijos el gusto por la lectura, mejorar su concentración, ejercitar su memoria y desarrollar su imaginación. Y nadie mejor que sus padres para contarles un sin fin de historias fantásticas.

 

Para ser un cuenta cuentos profesional debes tener un repertorio de cuentos que sientas que puede gustarle a tu público ( o sea, a tus pequeños); es muy importante que leas previamente el cuento que deseas compartirles.

 

Al principio, puedes contárselos mientras lees; poco a poco, puedes practicar contándoles una historia sin lectura de por medio. Practica voces graciosas que puedan despertar su atención. Es importante que la historia no sea plana: debes darle  una personalidad  distinta a cada uno de los personajes.

 

TE RECOMENDAMOS: 5 consejos para fomentar la lectura en los niños

 

 

 

 

 

 

 

Cuando puedas contar un cuento sin leerlo, recuerda que puedes improvisar: meter más diálogos y escenas, o quitar algunas; también te puedes acompañar de algún títere o muñeco que le guste a tus hijos.

 

No olvides gestualizar con tu rostro y el resto de tu cuerpo. Todos estos movimientos motivan su imaginación y te prestarán mayor atención.

 

También puedes hacerlos partícipes del cuento: hazles preguntas como “¿y luego qué creen que pasó?” Una de las cosas que más disfrutan los pequeños en los cuentos es el suspenso. Eso los divertirá muchísimo.

 

Después de un tiempo con esta dinámica, puedes invitarlos a que cuenten su propio cuento. Así desarrollarán más habilidades como hablar en público, estimular el lenguaje y ser más abiertos.

 

Ser un cuenta cuentos para tus hijos es una forma de divertirlos, reforzar su vínculo y traer maravillosas enseñanzas y habilidades para su vida.

 

NO TE PIERDAS: Fortalace la relación con tu hijo con ayuda de títeres 

 

 

Lee el articulo completo en: Padres e Hijos México
via http://www.padresehijos.com.mx