Como en muchas enfermedades, un diagnóstico oportuno puede ayudar a controlar la enfermedad y tener un tratamiento oportuno. En el caso del autismo, existen diversas señales que nos dan un indicio de que nuestros hijos pueden tener un problema de autismo, dependiendo de la edad de tu hijo.
A los tres meses:
No responde a ruidos fuertes.
No sigue con su mirada objetos en movimiento.
No sostiene o intenta agarrar objetos.
No le sonríe a la gente.
No hace ruidos como si estuviera intentando hablar.
No le presta atención a caras nuevas.
A los 7 meses:
No gira la cabeza para acompañar ruidos que provienen de otro lugar.
No te muestra afecto.
No se ríe o no hace ningún sonido.
No intenta agarrar objetos con la mano.
No sonríe.
No trata de atraer tu atención a través de sus acciones.
No muestra interés en juegos como peekaboo.
A los 12 meses:
No gatea.
No dice ni una palabra.
No gesticula con la mano o con la cabeza.
No te señala objetos o fotos con su mano.
No se puede parar si no lo ayudas.
A los 24 meses:
No camina.
No habla más de 15 palabras.
No arma oraciones de dos palabras.
No entiende el funcionamiento de objetos comunes como el teléfono, un tenedor o una cuchara.
No intenta imitar tus acciones o tus palabras.
No sigue instrucciones sencillas.
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