viernes, 8 de diciembre de 2017

Consejos de seguridad para evitar accidentes con las luces navideñas

En esta época navideña, las calles y hogares se llenan de luces y es un espectáculo realmente hermoso y que caracteriza esta temporada, pero también es común que muchas de estas instalaciones no estén hechas correctamente o compremos luces de mala calidad que pueden poner en riesgo nuestra casa y a nuestra familia, ya que pueden ocasionar accidentes eléctricos que terminan en corto circuitos y fuego. Por ello, expertos en la materia nos brindan una serie de lineamientos que debemos tomar en cuenta para evitar accidentes. ¡Toma nota!

 

Debemos cuidar que no se sobrepase el límite de carga de energía en la casa. No es recomendable poner una cantidad exagerada de luces.



No exceder el número de series conectadas una tras otra, normalmente el máximo es tres.



Que los cables no sean aplastados por puertas o ventanas.



Todas las luces se deben colocar siguiendo el instructivo de uso.



Para las luces que se ponen en el exterior se debe cuidar que el cable no se someta a aplastamiento o que tenga riesgo de romperse, procura que no quede sujeta en elementos filosos que puedan cortar o deteriorar el aislamiento del cable. Y si no son para exteriores, no debemos usarlas para este fin.



En el caso de las luces del interior se debe cuidar que los cables no pasen por debajo de alfombras, o que los cables puedan ser jalados, causando ruptura o desconexión.

 

Verifica que los foquitos no entren en contacto con elementos que puedan iniciar un fuego, como telas o papel.



Debemos checar que tengan la etiqueta NOM-ANCE, que indica que una muestra del producto fue evaluada en aspectos de seguridad.



Debemos evitar comprar luces piratas que se venden en los comercios informales, por más baratas que sean, si son demasiadas baratas es porque no tienen la calidad necesaria.



Debemos pedir garantía, al ser comprados en comercios formales.



Desconectar o apagar todas las luces antes de ir a la cama o salir de la casa, sin importar si están fuera o dentro de casa.

 

Que no estén al alcance de los niños, al paso de las personas o de elementos con movimiento.

 

Al desconectarlas, no jalar de los cables, siempre hacerlo jalando la clavija.

 




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