Hace unos días se dio a conocer el tercer hijo de Kim Kardashian y Kanye West acababa de nacer y como buena hija de multimillonarios la pequeña comienza su vida llena de verdaderos lujos.
Y es que según la publicación británica Closer, una fuente muy cercana a Kim confesó que la celebridad gastó medio millón de dólares en diversos productos para la bebé, la mayoría de ellos de origen italiano.
“Kim adquiriró los juguetes más caros del mundo para su recién nacida; entre ellos, un caballito con cristales de Swarovski de 137,000 dólares, un osito de peluche, de Steiff en colaboración con Louis Vuitton, con un costo de 170,000 dólares, y un chupón de oro de edición limitada firmado por Suommo Dodo que vale 96,000 dólares”, reveló el testigo.
Además, Kim compró lujosos juguetes e invirtió más de 100,000 dólares en prendas de edición limitada de Dolce & Gabbana y una cuna de terciopelo de Dolce Notte, otra más pequeña pintada a mano, un moisés de seda, un armario y una silla a juego; todo por 40,000 dólares. También mandó instalar una zona privada en su residencia para disfrutar de su familia lejos de los compromisos laborales.
“Kim también ha creado un spa para los niños en casa con una masajista, una zona de yoga y una piscina para los pequeños”, agregó el testigo.
Fue tanto lo que la celebridad gastó que incluso Kanye le dijo que dejara de gastar porque estaba fuera de control!, reveló la fuente.
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