A la mayoría de los niños (si no es que a todos) les atrae algún superhéroe en especial. Y es que no sólo se trata de su atrayente disfraz, sus increíbles super poderes o sus fascinantes historias. Los superhéores le transmiten a los niños un mensaje que mejora su autoestima.
Los superhéroes son para los niños un símbolo de poder y de fuerza que, además de admirables, los hacen sentir protegidos. Al admirar a un superhéore, los niños son capaces de desvanecer sus miedos y enfrentar sus adversidades cotidianas.
Todos, ya seamos pequeños o grandes, tenemos la necesidad de buscar un modelos a seguir, una guía que nos muestre valores y virtudes, y los superhéroes son ideales para darle sanas lecciones a nuestros hijos: están comprometidos con una causa, generalmente buena, en la cual dan su vida por otros y son incondicionales.
No sólo eso: los héroes, la mayoría enmascarados, buscan hacer el bien sin un reconocimiento más que la satisfacción de hacer el bien por los demás. Esta es una lección maravillosa, pues transmite a los niños la importancia de hacer el bien sin vanagloriarse.
Ante todo, la figura del superhéroe debe ser positiva y gratificante en la que pueda encontrar la fortaleza que necesita para su vida cotidiana, pues se trata de una personificación de los valores que lo hagan sentir fuerte, valiente y capaz de enfrentar sus adversidades y ayudar a otros.
Y a tu peque, qué superhéroe le gusta?
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