La lactancia es la mejor forma de nutrir a los bebés, pero también implica ciertas incomodidades en la mamá, sobre todo al principio. Por ejemplo, cuando “baja la leche” muchas mujeres experimentan fiebre, también al amamantar los senos se congestionan a tal grado que sentimos bolitas que nos duelen y los tenemos con mucha sensibilidad e hinchados.
Pero desde hace mucho tiempo, existe un remedio que ha pasado por generaciones y que realmente funciona. Sólo necesitas una col. Según varios estudios, esta planta tiene un efecto calmante y descongestionante comparable al de las compresas frías.
Para ponerlo en práctica, mete la col en el refrigerador por varias horas, ve sacando una hoja cada que termines de amamantar en cada pecho por al menos 20 minutos y ¡listo! Rápidamente notarás el efecto relajante y cómo te ayuda a evitar sentir los pechos congestionados, hinchados y sensibles.
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